La ubicación de los productos en el supermercado no es una cuestión aleatoria. En ello interviene toda una ciencia, el marketing, que nos ayuda a determinar cuál es el mejor lugar para colocar nuestros productos. En cierto modo, contribuye a la mayor o menor salida que pueda tener ese producto.
Desde Puntes queremos ayudarte a multiplicar las posibilidades de éxito, así que atento/a a todo lo que te contamos a continuación. ¿Conoces que son las zonas calientes y las zonas frías del supermercado?
Zonas frías vs. zonas calientes

Imaginemos que nos hallamos en un supermercado, amplio y espacioso. Hay infinitos pasillos que se comunican entre sí, pero hay uno sin salida, que parece peor iluminado y algo más desordenado. ¿Quién entrará en él para comprar? Muy poca gente. Transitarlo solo se hará en el caso de que aloje productos de primera necesidad. Esto es lo que se conoce como zonas frías del supermercado. En ellas hay menos tráfico de personas que en el resto del establecimiento.
Imaginemos ahora que entramos en una tienda y nos encontramos en el estante de en frente con un gran letrero que anuncia una promoción. Nos fijamos, ¿no es cierto? Esto ocurre porque también existen zonas calientes, aquellas de mayor movimiento, como la entrada al establecimiento o las cajas, por donde todos los compradores pasan de manera obligatoria en su periplo por el supermercado.

Atraer mediante el packaging
Una vez identificadas las zonas más apropiadas, el packaging entra en acción, y aunque no existe la fórmula mágica del packaging perfecto, es importantísimo que tengamos en cuenta el público al que nos dirigimos y que seamos capaces, en consonancia, de plasmar gráficamente los valores de nuestro producto: natural, sostenible, innovador, joven y fresco, clásico, refrescante… y qué valor diferencial aportan al comprador.

¿La clave? Conjugar la parte técnica con la creativa: un diseño funcional y práctico, fácil de usar, que conserve bien los alimentos en su interior y que respete el etiquetado normativo, sin dejar de lado el uso creativo del color, la tipografía, la forma del envase y un eslogan atractivo.
En este post, ya te contamos los errores que debías evitar en el diseño de packaging y en este otro, cómo diseñar productos para la Generación Z, pero te recomendamos que no pierdas de vista los trends que los expertos del sector gráfico lanzan anualmente y que pueden ayudar mucho a dar forma a tus ideas.
Todo ello es importante porque un packaging que se diseñara en 2015 podría no triunfar en 2022. Y seguramente el que creemos hoy, no servirá dentro de unos años, así que hay que reinventarse y readaptarse constantemente.
Biométrica y comportamiento del comprador: una experiencia real en Greenville, EE.UU.
Si el marketing nos dice qué localización es la más adecuada para un producto, la ciencia aporta al marketing los datos que necesita para llegar a esa conclusión. De hecho, actualmente se están llevando a cabo diferentes experimentos biométricos para medir los comportamientos y conductas humanas que pueden influir en las compras.

Si quieres conocer en qué consistió esta experiencia, puedes leer más aquí.