El famoso punto verde, que vemos en la mayoría de nuestros envases, no celebrará su 30 aniversario en Francia.
Este símbolo fue implantado en Francia el 16 de junio de 1992 por la empresa Eco-Emballages. Se colocó en el embalaje de un producto de uso doméstico señalando así que el fabricante del producto se suma al sistema de recuperación de envases y, por lo tanto, respeta las obligaciones definidas por los artículos R543-53 y siguientes del Código de Medio Ambiente.
El punto verde garantiza que el envase cumple con la normativa y que se reciclará mediante el sistema integrado de Gestión de Residuos de Envases (SIG). Otra cuestión es que los ciudadanos realicemos una correcta separación de sus residuos.


Las instituciones francesas consideran que el logo puede llevar a confusión con el símbolo original del reciclaje que se creo en 1970, donde cada una de sus tres flecha representa los tres pasos del proceso de reciclaje : recoger, reciclar, reutilizar.
La obligatoriedad del símbolo de Eco-emballages se eliminó en Francia desde finales de diciembre de 2016 y finalmente se ha prohibido por completo en productos destinados al mercado francés desde el 1 de enero de 2021.
En caso de incumplimiento, la sanción equivaldría a una sanción del 100% del importe de la aportación económica necesaria para la gestión de residuos.
Sin embargo, existen algunas reglas que permiten a los fabricantes vender las existencias existentes.
- La sanción no entrará en vigor hasta el 1 de abril de 2021.
- Para los productos envasados y los embalajes fabricados / importados antes del 1 de abril de 2021, será posible venderlos en el mercado francés durante 18 meses más.
- Los productos destinados al mercado español y chipriota, donde el “Punto Verde” sigue siendo obligatorio, estarán exentos de esta penalización hasta el 1 de enero de 2022, fecha a partir de la cual se beneficiarán de un plazo de caducidad de existencias de 12 meses.
Con el tiempo veremos si ésta tendencia se aplicará también en España